D-Wave Quantum: Un escenario de luces y sombras para sus accionistas

La cotización de D-Wave Quantum, especialista en computación cuántica, presenta actualmente una narrativa compleja para el mercado. Por un lado, un importante fondo de inversión refuerza su apuesta de manera significativa. Por otro, se registran ventas por parte de personas vinculadas a la compañía. Esta divergencia plantea un dilema a los inversores: ¿el respaldo del capital institucional tiene más peso que las salidas de los insiders y las cifras de pérdidas que, en una primera lectura, parecen elevadas?

Los resultados del tercer trimestre requieren un análisis que vaya más allá de la cifra neta. La pérdida declarada de 140,8 millones de dólares estadounidenses, aunque impactante, está considerablemente distorsionada por un factor contable.

Concretamente, 121,9 millones de dólares de ese total corresponden a la revalorización teórica de las obligaciones por warrants (opciones sobre acciones). El aumento en el precio de la acción elevó el valor contable de estos instrumentos, un movimiento que no supuso una salida real de efectivo de las operaciones del negocio. En el frente operativo, la empresa mostró progresos: sus ingresos se duplicaron interanual, alcanzando los 3,7 millones de dólares, y su cartera de pedidos continuó expandiéndose.

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Movimientos opuestos en el accionariado

La actividad reciente en el capital de la compañía revela tendencias contrapuestas. El fondo Citadel Advisors, de Kenneth Griffin, realizó una ampliación estratégica de su posición durante el tercer trimestre. Adquirió 122.600 títulos, elevando su tenencia total a 169.057 acciones. Esta movida de un actor tan relevante en Wall Street se interpreta como un voto de confianza en la trayectoria tecnológica de D-Wave.

En el lado opuesto, en los últimos 30 días se han vendido aproximadamente 289.000 acciones por parte de insiders. Si bien este volumen es menor a algunos rumores del mercado y suele obedecer a motivos fiscales, el contraste con las compras de Citadel es evidente.

Simplificación del capital y perspectivas

Un hito importante para la estabilidad corporativa se produjo en noviembre, con el rescate de todos los warrants públicos en circulación. Esta operación inyectó a la empresa alrededor de 54,6 millones de dólares brutos en capital fresco. Más relevante aún es el efecto estructural: la eliminación de estos derivados simplifica la capitalización de manera notable, lo que probablemente reducirá la volatilidad futura derivada de ajustes de valoración.

D-Wave Quantum se mantiene como un valor disputado, donde el potencial a largo plazo de su tecnología se enfrenta a una valoración exigente. La entrada de Citadel sugiere que los inversores profesionales identifican oportunidades en los niveles actuales, a pesar de la volatilidad. El foco del mercado estará ahora puesto en la velocidad con la que el proceso de comercialización se traduzca en flujos de caja reales y sostenibles.

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