ASML: La apuesta tecnológica indiscutible para 2026

Los inversores observan con atención el impresionante recorrido de la acción de ASML, que ha registrado una subida cercana al 50% en lo que va de año. Ante esta revalorización, surge la duda lógica sobre si aún queda margen alcista. Los analistas de Bank of America tienen una respuesta contundente: no solo mantienen su confianza, sino que han designado al proveedor clave de la industria de los semiconductores como su elección principal para el próximo ejercicio.

Partiendo de una cotización en torno a los 1.098 dólares estadounidenses, el valor recibe un nuevo impulso tras la actualización de Bank of America (BofA). La entidad ha revisado al alza su precio objetivo hasta los 1.331 dólares (aproximadamente 1.158 euros), lo que sugiere un potencial de revalorización significativo desde los niveles actuales.

El optimismo de los analistas se fundamenta en las perspectivas financieras a medio plazo. Anticipan un ciclo de crecimiento de varios años, impulsado por la creciente intensidad de los procesos de litografía en la fabricación de chips. En concreto, BofA proyecta que el flujo de caja libre (FCF) de ASML podría duplicarse para 2027, alcanzando unos 14.000 millones de euros. Esta visión es compartida por el consenso del mercado, donde actualmente un 73% de los analistas recomienda comprar la acción, frente a un escaso 5% que aconseja vender.

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La fortaleza de una posición de mercado única

La trayectoria de ASML está intrínsecamente ligada a la expansión global de la infraestructura de inteligencia artificial. La compañía disfruta de un cuasi-monopolio en la fabricación de máquinas de litografía EUV (luz ultravioleta extrema), equipos esenciales para producir los chips de IA más avanzados, como los diseñados por Nvidia o AMD.

Grandes clientes, como Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. (TSMC), se benefician de las enormes inversiones de los hyperscalers. Se estima que el gasto en este sector podría alcanzar los 500.000 millones de dólares en 2026. Dado que TSMC está expandiendo su capacidad, incluyendo un programa de inversión de 160.000 millones de dólares en Estados Unidos, la demanda de los sistemas de ASML debería mantenerse sólida. Para el ejercicio completo de 2025, la dirección de la empresa prevé unos ingresos de unos 32.500 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 15% interanual.

Consolidación técnica y próximos catalizadores

A pesar del panorama positivo a largo plazo, la acción registró una ligera corrección el viernes, con una caída de casi un punto porcentual. Los observadores del mercado interpretan este movimiento como una consolidación técnica normal tras la fuerte tendencia alcista del año. Desde un punto de vista chartista, el valor encuentra un primer nivel de soporte en torno a los 1.068 dólares. Una ruptura clara por encima de la zona entre 1.109 y 1.129 dólares podría desencadenar un nuevo impulso hacia los objetivos de los analistas.

La atención se centra ahora en los resultados del cuarto trimestre. ASML ha indicado que prevé unos ingresos netos de entre 9.200 y 9.800 millones de euros para este periodo. Será crucial ver si la compañía logra defender su margen bruto, que se espera supere el 52% para todo 2025, y si avanza según lo previsto en las entregas de sus costosos sistemas High-NA EUV.

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